Esta edición y traducción de la Sāmkhyakārikā de Īshvarakrishna, a cargo de Laia Villegas es una delicia. El sāmkhya es una de las seis escuelas de la filosofía hindú —la más antigua de ellas—, que desapareció a finales del siglo XVII y cuya influencia alcanza franjas tan sustanciales del pensamiento indio como las upanishad, la mitología de tradición oral o purāna, partes tan ilustres del Mahābhārata como el Mokshadharma y la Bhagavadgītā, la medicina tradicional india o āyurveda, el shivaísmo de Cachemira, los tratados de hatha-yoga y los Yogasūtra de Patañjali.
Lo cual sería ya motivo suficiente para avivar la curiosidad yóguica, pues la esencia del sāmkhya sin duda empapa las raíces más profundas del yoga. Pero aun sin contar con este aliciente, bastaría el hecho de poder sumergirnos en una cosmovisión coherente, accesible y compacta, cuyo propósito principal es disolver todo atisbo de sufrimiento innecesario en esta forma limitada y transitoria de existencia. Una existencia marcada por un ciclo condenatorio, la rueda karmática del samsāra, la cual, si llegara a su fin, nos permitiría acceder a un estado —moksha, kaivalya o nirv̄āna— de salvación o liberación.
La introducción del libro se traduce en una invitación a su lectura. En pocas páginas nos brinda un dinámico y provechoso bosquejo del escenario en el que hemos entrado. Si tiendes a evitar los prólogos por ser aburridos o superfluos, te aseguro que este no es el caso.
Las estrofas de Īshvarakrishna vienen presentadas en su texto original sánscrito, grafiadas en devanāgārī. Debajo de ellas viene la transliteración en alfabeto IAST, para su correcta pronunciación en nuestra lengua. Le sigue la traducción de la estrofa y finalmente un comentario sobre la misma. Además, esta edición añade referencias directas a los Yogas̄ūtra de Patañjali cuando aparecen nociones comunes entre ambos sistemas filosóficos, lo cual resulta de un gran valor para los profesores de yoga.
Laia Villegas es una experta sanscritista y especialista en filosofía hindú, y su traducción de la Sāmkhyakārikā, publicada en la Editorial Kairós, es la primera que se hace en nuestro idioma. Todo un lujo.